Efectivamente, Covid-19 ha puesto nuestras vidas patas arriba. La pandemia de coronavirus se ha convertido en una prueba de fuerza no sólo para los sistemas inmunitarios, sino también para las relaciones. El aislamiento forzoso tomó por sorpresa a muchas familias. Para la mayoría de las parejas de todo el mundo, la cuarentena se ha convertido en un motivo de ruptura o incluso de divorcio.
Desafíos de Covid vs. Relaciones: ¿Qué ha cambiado?
Como se ha mencionado anteriormente, durante la pandemia, las relaciones de muchas personas tuvieron que soportar algunos nuevos retos. He aquí algunos de los mayores obstáculos a los que se han enfrentado estas parejas.
Equilibrio entre vida y trabajo
Antes de que sucediera “todo”, la mayoría de la gente trabajaba en sus oficinas. Por desgracia, la situación de Covid cambió las cosas de forma significativa, y la mayoría de las empresas trasladaron a sus trabajadores a un modelo de “trabajo desde casa”. Los que no tuvieron esa suerte se vieron obligados a dejar sus trabajos debido a la incapacidad de la empresa para soportar la crisis.
Trabajar desde casa parecía una idea fantástica para mucha gente, mientras que resultó no ser tan emocionante en la realidad. Las nuevas condiciones de trabajo obligaban a las personas a realizar cambios en su rutina para los que no estaban preparadas, como por ejemplo trabajar con niños en casa.
Demasiado tiempo juntos
El cierre provocó que muchas parejas se encontraran atrapadas juntas en sus casas sin posibilidad de salir. Los conflictos en el seno de las familias empezaron a intensificarse. Al fin y al cabo, las formas tradicionales de aliviar el estrés no funcionaban: los cónyuges no podían ir de compras con sus amigos, visitar un salón de belleza o contactar de forma esporádica con escorts Capital Federal.
El aislamiento condujo a la “fiebre de la cabaña”, como en la novela de Stephen King, El resplandor, donde un aspirante a escritor se vuelve gradualmente loco, encerrado en un hotel alpino con su mujer y su hijo. Muchas parejas acabaron en una larga e inesperada expedición sin ninguna preparación psicológica previa.
Fracaso de las relaciones a distancia
Fue devastador escuchar que los viajes turísticos no serían posibles debido al encierro. Sin embargo, para algunas parejas, el cierre de los desplazamientos significó algo peor: la imposibilidad de verse durante mucho tiempo. Al final, las relaciones se resintieron y muchas parejas decidieron romper y buscar sexo en Argentina para aliviar la soledad.
Quedarse en casa con los niños
Desde que todas las guarderías y escuelas empezaron a cerrar debido a la pandemia, la vida de los padres se hizo más difícil. En primer lugar, a los niños les da igual que sus padres tengan que trabajar. Se hizo mucho más complicado para las parejas mantener el mismo nivel de productividad y al mismo tiempo cuidar de sus hijos. En segundo lugar, a veces es complicado explicar a los niños pequeños por qué ya no pueden salir a la calle, visitar a sus amigos o ir al colegio.
Falta de espacio personal
La pandemia fue un acontecimiento bastante inesperado, y la gente se aisló en sus casas sin estar necesariamente preparada. Cuando dos personas viven en un piso de una sola habitación, parece una situación normal. Sin embargo, si se está atrapado allí y no se puede ir a trabajar o reunirse con los amigos, se convierte en una verdadera prisión. Todo el mundo necesita un espacio personal en el que pueda estar solo durante algún tiempo. La falta de ese espacio en el día a día puede y probablemente hará que la persona se enfade un poco más cada día. Muchas parejas empiezan a irritarse entre sí por eso.
Nadie esperaba acabar en la situación a la que les obligó la cuarentena. Estar encerrados juntos se convirtió en algo bueno para algunas parejas, que por fin tuvieron algo de tiempo para resolver sus problemas. Para otras, fue un completo desastre que sólo condujo a la ruptura. Mientras la tasa de matrimonios sea mayor que la de divorcios, podemos tener la esperanza de que la gente puede encontrar razones para permanecer juntos incluso en un momento complicado como éste.
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