Hace trece meses Fernando G. de 27 años, fue acusado de abuso sexual y detenido en Oberá. Alem News visitó a Elsa, su mamá, y también al sospechoso para conocer sus versiones de los hechos.
Sobre el caso
En julio de 2020, una mujer de 30 años denunció que el 1 de marzo fue violada. En septiembre del mismo año, declaró su hermano, su principal testigo, aunque su versión tuvo contradicciones respecto a los dichos de la presunta víctima.
La pesadilla de Fernando G. empezó un tiempo después, precisamente el 15 de abril de 2021, cuando el Juzgado de Instrucción 1 de Oberá ordenó su detención y lo privó de su libertad alojadolo en la Seccional Tercera donde se encuentra actualmente.
Los primeros cuatro meses fue asistido por un defensor particular que le recomendó que se abstenga de declarar y no presentó mayores pruebas, por lo que el juzgado interviniente dictó el procesamiento por abuso sexual con acceso carnal.
En tanto, que desde la mitad del año pasado la nueva defensa aportó una serie de pruebas a favor de la inocencia del acusado, como ser nueve testigos que estuvieron con él entre la noche del 29 de febrero y la mañana del 1 de marzo de 2020, mensajes de WhatsApp y fotos que corroborarían sus dichos.
Además, a fines del año pasado, se recepcionó la pericia realizada sobre el celular del imputado que estuvo a cargo de la Secretaría de Apoyo para Investigaciones Complejas (Saic), en la que se constataría que no estuvo donde dijo la denunciante. A pesar de esto, las autoridades judiciales rechazaron el pedido de excarcelación y el expediente será elevado a la Cámara de Apelaciones.
“Le hicieron una cama”
En diálogo con Alem News, Elsa, madre del acusado, aseveró “mi hijo es inocente, es una denuncia totalmente falsa, presentamos testimonios, fotos, pericias del teléfono que comprueban que él no realizó semejante aberración y todavía sigue encerrado, es una locura”.
Según la versión del implicado la noche de febrero de 2020 él se reunió con sus padres, hermanos y cuñadas a comer un asado, ocasión en la que se tomaron varias selfies que constan en el expediente.
Incluso, en una de las fotos se observa a que a las 2.30 del 1 de marzo aún estaba con su familia, cuando un testigo de la denunciante declaró que a las 2 lo vio ingresar a un pub de calle Córdoba, es decir media hora antes de lo que consta en los datos de la selfie.
En la declaración de Fernando G., luego de cenar con su familia se dirigió a un salón de eventos sobre ruta provincial 5. Entre los testigos citados por su defensa se presentó un amigo que aportó una foto tomada en el lugar a las 4.46 del 1 de marzo. Esto también descartaría la idea de que a las 2 estaba en el pub de la calle Córdoba.
El sospechoso estuvo en el salón de ruta 5 hasta casi las 6 del 1 de marzo, tras lo cual se dirigió con un amigo al centro de Oberá, compraron cerveza y dieron vueltas hasta las 9 de la mañana, cuando regresó a su casa.
En una entrevista exclusiva con Alem News, Fernando G. expresó “no encuentro razones ni motivos por los cuales me tienen detenido todavía, lamentablemente voy a cumplir diez meses por un hecho que no cometí, tengo todas las pruebas a mi favor y sigo viviendo esta injusticia”, indicó.
Tanto la versión de la denunciante como la de su hermano, su principal testigo, reflejan contradicciones y son dos declaraciones totalmente diferentes. Se espera que en los próximos días la justicia se expida al respecto.
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