Los vecinos se organizaron en minutos para detener la propagación de las llamas en conjunto con el intendente local, que manejó la retroexcavadora que hacía los ingresos para los bomberos.
La capacidad de organización y las urgencias en la provincia quedaron evidenciadas en repetidas ocasiones cuando los vecinos se juntaron para detener los focos de incendios forestales.
Pero en esta oportunidad, sorprendió a los propios bomberos de San Javier y de Santa María, que veían en su llegada a cientos de vecinos caminando con baldes, mochilas de agua, botellas y todo lo que podían llevar para ser parte de los equipos de trabajo en Itacaruaré.
La comunidad resistió al fuego:
Todo el pueblo sabía que la única forma de controlar las llamas era la organización. En tal sentido, el codo a codo que une saberes y fuerzas para apagar el fuego se hicieron presente.
Todo comenzó por un pedido en grupos de WhatsApp de Lorena, hija del mismo alcalde local, que ya estaba avocado a desmalezar con la retroexcavadora la zona que tenían que ingresar los bomberos voluntarios.
Pero nada hacía suponer lo que pasaría, ya que, a los pocos minutos, las calles de tierra se poblaron de personas caminando hacia los focos de incendios, como si hubiesen sido entrenados por años en este tipo de catástrofes naturales.
La unión hizo la fuerza:
Pasadas las 17.30 hs, las llamas fueron controladas y los vecinos festejaban, pero la alerta continuaba.
“Estamos sorprendidos, no creíamos que tanta gente se juntara en poco tiempo a apagar el incendio, nunca vimos algo igual”, comentaron bomberos voluntarios de San Javier a Alem.News.
Comentar con Facebook
