Gracias a su trabajo, conoció e hizo amistad con todos. Ahora, a sus 74 años, el “sereno de la Avenida” de Alem, comparte con familiares y amigos sus casi 30 años de profesión, con la que se convirtió en confidente y héroe de muchos vecinos.
A pesar de su edad, Roberto Neris conserva una memoria excelente, dato no menor para aquellos que fueron estudiantes y hoy pasan a saludarlo con sus familias a cuestas, siempre guardando los secretos que muchos prefieren olvidar. No hay quien no tenga una historia con él, desde aquellas conversaciones que mantenía en las veredas de la Avenida Belgrano con los vecinos, algunos de los cuales llegó a entablar amistad e incluso ejerció de cómplice al ocultar sus escarceos amorosos, que seguramente… nunca las contará, como buen amante de su profesión. Vaya que lo hemos intentado!.
A pesar de que de madrugada era habitual encontrarse con borrachos y peleas en la calle, Roberto dice que no sentía ningún miedo ya que los serenos estaban “para todo lo que pudiera ocurrir”, hasta el punto de trasladar a presuntos delincuentes a la comisaría de Policía e intervenir en la solución de algún conflicto de enamorados.
Casi a las piñas con el cura del pueblo:
Si hay anécdotas que destacar y recordar de la vida de Roberto, sin lugar a duda la de la pelea con el Padre Narciso es una de las tantas. Cada uno lo cuenta de forma distinta y con otras versiones, pero Visitemos Misiones pudo averiguar la real.
“Lo que pasó es que según me cuenta mi padre, el Cura estaba esperando una encomienda en la empresa Singer, el Subgerente no estaba y como mi papá no lo conocía llamó a la policía, que lo frenó y le pidió documentos sin saber que era el Cura del pueblo, recuerda Fernando, hijo de Roberto y esclareciendo un hecho que todos recuerdan y se comparte con historias distintas en las peñas de amigos.