Delfor tiene 86 años y cuando un vecino lo encontró en mal estado, notó que solamente se alimentaba con agua y un poco de azúcar, además que, un supuesto “amigo” cobraba su pensión.
Durante más de un año, una persona a lo que los vecinos identifican como “Juan”, se aprovechó del estado de vulnerabilidad de Don Delfor De Melo, quien vive en precarias condiciones a unos 1500 metros de la Ruta Provincial N° 4 en el km 37.
“Cuando lo vinimos a ver luego de que nos contaron lo que pasaba, llegamos y nos dijo que estaba tomando agua con un poco de azúcar y hace más de una semana estaba igual, no se podía levantar, no tenía fuerzas”, comentó a Alem.News uno de los encargados de una iglesia cercana que asistió a De Melo en un primer momento.
Con sus pies completamente agusanados y ya sin sensibilidad en ambos lados, con estado avanzado de falta de irrigación sanguínea en la zona, Delfor tiene una infección general en el cuerpo que necesitaba ser tratada de urgencia, aunque se niega a ser atendido por personal médico o de enfermería.
“No quiero irme a ningún lado, tampoco quiero que me vean, de acá solamente salgo muerto”, dijo el octogenario ante la llegada del personal del SAMIC local a su domicilio.
Ex Combatiente solidario:
Desde el momento que se conoció el caso en la zona, fue Oscar, un ex soldado movilizado de la guerra de Malvinas quien comenzó a asistirlo a diario.
“Yo lo baño y hago la comida ahora para el señor también, es un ser humano y Dios no permite que dejemos en abandono a un hermano, no importa lo que haya hecho”, dijo.
El caso Delfor
Don Delfor de Melo fue uno de los 4 acusados por la violación y asesinato de Angélica Schnarbach, la maestra rural que dejó jirones de su vida en la Picada Sueca.
Aquel fatídico día, fue un colono local que al pasar con su caballo notó que los perros de la zona estaban alterados, por lo que decidió acercarse al arroyo y ver qué pasaba, encontrándose con el cuerpo en parte desgarrado por las mordidas de los animales y el fétido olor que despedía. Según el relato del lugareño a las autoridades, su rostro era irreconocible y el cadáver desnudo tenía signos de haber sido arrastrado desgarrando su piel.
Por el caso, Delfor estuvo tras las rejas durante 20 años. Al momento de ser detenido, tenía solamente 16 y otros dos implicados nunca fueron encontrados por la justicia.
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