“No aguantamos más”, reclamaron trabajadores y ex trabajadores de la fiesta en comunicación con nuestro medio.
Las denuncias internas contra la encargada de los talleres, Graciela Haupt de Vallerino, llegaron incluso a oídos del principal organizador, Marcelo Dacher, quien pidió “no hacer público lo que ocurre para evitar que los denunciantes tengan problemas legales”.
“Nos amenazaron para que no se cuente porque vamos a tener serios problemas legales incluso podemos ir presos”, aseguraron a Alem.News trabajadores y ex trabajadores de los talleres.
“Ya era insostenible, incluso una de las chicas tuvo que renunciar porque solo se burlaba todo el tiempo de su ropa, de como hablaba, hasta le decía cuando llegaba que ya llegó esa negra, hasta que logró sacarla e impedirle el acceso al predio”, denunciaron.
Los supuestos maltratos reiterados por parte de la encargada, llegaron al límite cuando en una discusión destrató a uno de los empleados por ser gay.
“Llamaba a uno de los chicos “PUTÓN” y el pobre incluso trató de hablar con el INADI y lo amenazaron en varias oportunidades y al preguntarle porque le decía así comentaba abiertamente que no le gustaban los putos y los negros”, alertaron.
Piden que se vaya
Si bien los trabajadores de la fiesta perciben un salario mensual de 15.000 pesos por tareas diarias, muchos de ellos siguen trabajando por amor a la fiesta más que por el dinero, pero no están dispuestos a seguir tolerando los malos tratos y piden que Vallerino deje su cargo.
“Dacher y la misma municipalidad saben lo que pasa, pero pese a las amenazas que nos hacen con tener problemas legales y que podemos ir presos ya no se aguanta mas y algo teníamos que hacer y si esta es la forma preferimos hacerlo, pero estar bien con nuestra conciencia”, concluyeron.
Es difícil a estas alturas estimar los daños ocasionados a la salud mental de los que vivieron el último año la pesadilla, que, finalmente, se animaron a relatar, pero no caben dudas que, si se espera seguir con el trabajo que se viene realizando en los talleres de la fiesta, algo tendrá que cambiar.
Comentar con Facebook
