La historia de Bernardino Correa, llegó a la redacción de Alem.News gracias a sus vecinos, que lo veían llorando a diario por su hijo que no lo ve desde que supuestamente fue a la guerra de Malvinas.
Don Bernardino vive en la localidad de Cerro Corá en una precaria vivienda con piso de tierra, con estructuras de madera que cedieron con el tiempo y en un total estado de abandono. Sus vecinos colaboran muchas veces llevándole comida, especialmente los días de lluvia, ya que cuando llueve, su cocina se inunda y no puede salir de su pieza, único lugar que puede mantenerse seco.
En su relato, Bernardino pide que le digan que pasó con su hijo que fue a la Guerra de Malvinas y al que sigue esperando que su hijo entre a su humilde casa hace más de 38 años.
Según Correa, su hijo, Jerónimo Gómez, había nacido en Oberá, Misiones, el 3 junio de 1963 o 64, tenía 18 años cuando fue designado a la Marina de Tierra del Fuego y de ahí a Malvinas en 1982. Tenía el apellido de su madre, Blanca Gómez, ya que Bernardino trabajaba como tarefero en esa época y no la dejaron poner el apellido del padre en el registro sin presentar sus documentos.